El valle de Roncal ha sido también, durante siglos, tierra de carboneros.
A diferencia de otras localidades roncalesas, en Burgui, al menos en los últimos tiempos algunos carboneros eran forasteros.
El oficio de carbonero existió en este pueblo hasta casi la mitad del siglo XX (1950); elaboraban el denominado carbón vegetal.
Algunos vecinos del pueblo les vendían una cantidad determinada de árboles (haya, chaparro, encina….) de su propiedad.
Luego los propios carboneros talaban los árboles comprados. Algunos troncos de cierto grosor y más lisos los separaban para madera. El resto del material se aprovechaba para carbón. Una vez cortados y troceados los árboles, los dejaban un tiempo a secar.
Construcción de carboneras
Cuando el material estaba seco, preparaban una especie de era (terreno liso y llano), donde asentaban la carbonera. En el centro colocaban los mejores troncos. Al final, en la parte más exterior, la peor leña.
Poco a poco, en círculos concéntricos, el montón de leña iba creciendo en altura y engordando en anchura, buscando la forma de un cono. Forraban después la pila con una capa de paja, helechos o ramas de boj, para que no pasase al interior la tierra muy fina con la que cubrían la carbonera. Alrededor de ésta y a ras de suelo, ponían una corona de encendallo (ollagas, boj seco etc.).
Se prendía fuego a la carbonera por arriba a través de una pequeña abertura en la cúspide. Los carboneros subían hasta allí por una escalera. Repetían muchas veces la misma operación: avivar la llama, y volver a taparla, para que el fuego fuera penetrando cada vez más abajo. También abrían gateras laterales, para conseguir que el fuego prendiera por toda la pira, no sólo en el centro.
El proceso era largo, peligroso y requería cuidados constantes. Tras unos quince días de cocción, estaba a punto el carbón, que era transportado en sacos sobre burros o mulos hasta la carretera.
El rendimiento venía a ser alrededor de un tercio de la leña empleada. Por ejemplo, una carbonera de 15.000 kilos venía a dar unos 5.000 kilos de carbón.
Carboneras en Burgui
En Burgui se hacían carboneras en distintos puntos del término municipal: Ugañain, Sagarraga, Zegarra…. Hacían el carbón en el buen tiempo, de marzo a octubre.
Los carboneros se quedaban en el monte, en alguna borda cercana, durante la campaña. Apenas se les notaba en el pueblo, aunque sí se supo que por esos años (1940 a 1950) murió en Ugañain un carbonero manipulando la carbonera.
El carbonero
El de carbonero era un oficio más del pasado, aunque peligroso, solitario, y que no daba mucho dinero, al menos a los que hacían la leña y el carbón.
Forma parte de esa amplia red de oficios que se ha tejido en nuestros montes en torno a la madera.